¿Para qué mimar al sueño?

Para mirarlo, admirarlo, concertarlo. Para escribirlo, crecerlo de nubes, hojas y boleroglam. Para escucharlo, al fin. Tocarlo y, con ello, invitarlo suave y sereno justo y piadoso a la mesa del caucus. Con inquietud amorosa, Yésica Isabel

Mulberry Street

Mulberry Street. Pero al abrir la puerta siempre estoy yo. Con un vestido hermoso de esos de antes, de pliegues dulces en la falda, cintura ajustada —quita respiros— y hombros ampliamente descubiertos, como si fueran sus telas colgantes, en realidad, telas grecoromanas colgando de mis huesos cóncavos—convexos (depende siempre de dónde se me mire y…

escribir me ha sacado de casa

Me propuse escribir “como antes”, al menos una vez por semana. El “como antes” viene de un antes que duró al menos una década. No ha sido ni fácil ni difícil la tarea de volver a ello. Sólo ha sido. Y creo que está justo ahí la respuesta a la que aluden todos los libros sobre escritura como oficio, como pasión, como distracción y, sobre todo, como…

—Te quiero. —Escribe.

No sé por dónde empezar. Me gustaría hablarte del calor inmenso que viste a este día de verano tropical. Por otro lado, me gustaría contarte acerca de los boleros que acabo de escuchar en el café de la calle de San Francisco. Pero, he de decirte, de lo que quiero contarte es de ayer. Ayer. Wow. Ayer. En esta búsqueda de sentido, más allá de los co…

El café me sigue quedando mal

Son casi las ocho de la noche cuando les escucho hablar. Comienza la conversación mientras ven televisión. Mamá dice en tono neutral algo sencillo: "Se me quemó la cafetera".  Noto que casi al final, justo al pronunciar la última palabra, le crece a su voz un rabo de tribulación.   Papá le escucha y responde con preguntas tranquilas. Es …

Carta Abierta a Daniel Naranjo

Querido Daniel, Te digo “querido” desde ya porque quiero que recibas el querer que sentí querer cuando escuché tu voz repetida desde el otro lado del teléfono. Imaginé, sin peajes, que estarías localizado qué-se-yo en Guanajuato o Mérida, y que a las 10:15 am CST, sin excepciones, siempre bajas por escaleras rojo brillante hasta el primer piso, te…

¡Bienvenidas las luces salvadas de la sombra!

Para siempre.