desde el que nacen las palabras

Afuera llueve.  Adentro, la mesa del comedor ─de madera, vieja, heredada─ sirve de espacio de construcción.  Hoy la miro diferente.  Pienso en las muchas vidas que ha vivido y en las muchas que le faltan también.  La recuerdo en San Sebastián, siempre dispuesta; igual que todo lo sencillo.  Quizás la miro diferente hoy porque, hace apenas unos segundos, acabo de sentarme de nuevo frente a ella, luego de lavarme las manos, como si fuera en realidad el primer paso en antesala a una labor quirúrgica. Aún no sé qué órgano en específico será el que termine por corregir.  ¿Acaso será ese desde el que nacen las palabras?


Con curiosidad,

Y. Isabel

septiembre 2022